Hoy sin duda, el mundo del periodismo y la ciudadanía europea en general, estamos conmocionados por el terrible atentado yihadista contra la sede del semanario satírico francés Charlie Hebdo, en el que fallecieron 12 personas, seis de ellos redactores y dibujantes de la revista. El lema del día ha sido Je suis Charlie Hebdo, todos somos Charlie.
Muchos auguran hoy el ataque, más que contra los fallecidos, contra la libertad de expresión en sí misma: los asesinados lo fueron por publicar caricaturas del profeta Mahoma, y hacer humor con la religión islamista.
Desde aquí, quiero rendir un pequeño homenaje a los compañeros muertos.
Pero mi pregunta es Suis-je Charlie? (¿Soy Charlie?) Políticos españoles han vanagloriado hoy el lema, como una pugna en defensa de la libertad de expresión. Sin embargo, son los mismos que hace poco tiempo sacaban una ley que atenta en gran medida contra esta libertad en nuestro país. ¿Hasta qué punto la libertad de expresión llega o no? ¿Cuándo somos Charlie y cuándo no?
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